14/05/2014 a las 17:27

Pedro Moreno, coordinador de Eureka: “Reivindico el roce. Somos tres asociaciones y nos tenemos que distinguir”

Entrevistamos a Pedro Moreno, coordinador general de Eureka. Reivindica el roce con el resto de asociaciones, porque de lo contrario “estaríamos siempre diciéndonos lo buenos que somos” (?). Moreno defiende la gestión de la mayoría que ha ostentado la coalición Eureka en el sector estudiantil del Claustro durante estos dos últimos años. Por Alberto R. Aguiar, Javi Skan, y Manolo García para el test de Manolo García. Fotos de Isabel Vargas.

Ocho de la tarde de un lunes. Pedro Moreno se acerca radiante a la puerta de la Facultad de Ciencias de la Comunicación. La distancia se reduce a apenas unos cincuenta metros cuando, de repente, Moreno se da la vuelta y aumenta la insalvable brecha en otros cincuenta metros. Poco después vuelve, en lo que parece ser un extraño ritual del asociacionismo estudiantil. LA TABERNA GLOBAL afronta una entrevista dura y procura adaptarse en lo posible a lo que parece ser el líder de una gran coalición de asociaciones poco colega de las gaviotas. En la segunda planta de la facultad, tirados en el suelo, en círculo. Comienza la asamblea. Sin embargo, a los pocos minutos se ve interrumpida por la conserjería del centro. ¿Represión? ¿Censura? ¿Dictadura? Solo tú, umeño, puedes decidirlo. Pero el inquebrantable Moreno salvó un obstáculo más, una puerta no abrible conectada a una alarma, que pitó mientras entrevistado y entrevistadores salvaban la curiosa trampa. “Qué adrenalina, ¿eh?”. El show estaba apunto de empezar.

El año pasado Eureka vivió sus primeras elecciones. El ser novatos, ¿supuso dificultades, o desventajas?

Ser el nuevo siempre es difícil, en cualquier sitio o lugar. Pero el modelo de Eureka, en red, de plataforma que acoge a las asociaciones independientes de cada centro, nos facilitó el trabajo en la medida en la que las personas de cada facultad conocen mejor sus problemas y no hace falta hacer encuestas al alumnado en cada sitio. No somos como una asociación grande, que tiene que llevar a gente de Derecho a la Facultad de Comercio y Gestión. Estamos muy tranquilos porque sabemos que el trabajo que Eureka tiene que hacer en cada centro lo hará gente de esos centros y de forma bastante eficiente.

Sin embargo, al principio fue complicado aunar a todas esas marcas independientes.

Sí. Por aquella época (hace dos años) yo era “bebé” en lo que a asociacionismo estudiantil se refiere. Pero por lo que me cuentan mis “mayores”, por así decirlo, sí fue difícil aunar tanta postura ideológica. Eran diferentes formas de hacer las cosas, diferentes formas de actuar y, a fin de cuentas, diferentes formas de solucionar problemas que eran distintos en unos y otros sitios. Pero se logró una idea, un proyecto común, que finalmente ha surgido y se mantiene en el tiempo, lo que tiene mérito.

¿Un ejemplo de esa división ideológica?

Pues por ejemplo, no trabajan igual en AFyL que en AJILET.

¿Creéis que la marca Eureka ahora es más conocida que hace dos años?

Creo que, entre comillas, la marca Eureka ha llegado más ahora a los estudiantes. ¿Qué pasaba antes? Aunque no conocieran a Eureka, los alumnos votaban a las asociaciones que sí conocían de su facultad. Lo hacían porque ya habían visto su trabajo. Eureka era como lo secundario, la plataforma en las que se englobaban las asociaciones.

Entonces, ¿la gente conoce las asociaciones?

No. Creo que, de estudiantes, un 25%, o un 30%, conoce y sabe distinguir a estas asociaciones. Eureka es Reforma 2 para muchos (ríe). De gente que las conozca (las asociaciones), que sepa sutrabajo, que sepa distinguirlas… es muy bajo el porcentaje.

Y a ese escaso porcentaje de gente que sí sabe distinguir las asociaciones, Eureka, ¿cómo les convence de que tienen que votaros?

Con el trabajo diario. La casuística de cada centro es particular, pero en general, todo el trabajo, a nivel informativo, de las movilizaciones, el trabajo institucional… ha sido intenso. Creo que una persona que ha estado siguiendo la representación estudiantil desde, al menos, un marco externo, lo habrá visto y lo sabrá valorar.

Hace unos meses convocasteis unas asambleas informativas sobre temas que afectan e inciden sobre el alumnado directamente. Muchas veces el argumento usado para justificar que no tenéis capacidad de movilización es que muchas veces las asociaciones os enzarzáis en peleas, o hacen actividades que no son de interés de los alumnos. Estas asambleas sí lo eran. ¿Por qué no funcionó?

Aquellas asambleas se enmarcaron en unas especies de jornadas en el Campus de Teatinos, y luego en la Facultad de Estudios Sociales, en la ampliación. La de aquí, la que tuvo lugar en Teatinos, fue terrible. Salí desangelado. La preparamos muy bien y fueron solo 20 ó 25 personas. Fue algo que nos fastidió, pero entendimos que era la casuística de ese momento preciso, véase o que fue una fecha mala, o que no hicimos una difusión adecuada, que no hicimos suficiente cartelería… porque, a fin de cuentas, poca gente consulta las redes sociales de una asociación universitaria. No hicimios llegar a la gente nuestros mensajes. Pero también hay gente que no viene porque pueda pensar que el tema de la asamblea es que yo, por ejemplo, que nunca me he ido deErasmus, voy a hablar del tema para vender la moto de Eureka. Y no fue así. Para hablar de Erasmus llevamos a Marieta Sánchez (redactora de LA TABERNA GLOBAL), que era una persona que se lo había currado. Llevamos a gente experta en lo suyo, que habría aportado muchas soluciones a los estudiantes. Esperamos que para las siguientes convocatorias de asambleas haya un resultado mejor. Tampoco tuvimos el apoyo de instituciones, pero haciendo autocrítica, tampoco lo buscamos.

Hablas de trabajo diario, si bien es cierto que Eureka ha pasado de ser cabeza visible en la movilización estudiantil a ir, en este sentido, como a trancas y barrancas. Por ejemplo, muchos estudiantes os han echado de menos en el conflicto del recorte de becas.

Ese es un pensamiento que se torna injusto. Si bien en otro momento hemos respondido a esas situaciones, cuando veíamos a a gente que se comía las asambleas, con una situación candente y con ánimo de encontrar soluciones, la movilización tenía sentido. Pero ahora que no es así, nos hemos dedicado a hacer comunicados, hemos puesto el correo a disposición de los alumnos para solucionar sus problemas, a través del cual atendemos a cada cual que lo requiera pidiéndonos información, hemos elaborado una guía del becario par todo el que quisiera, para que esté, sin pagar un duro, a golpe de click… Toda esa información, por ejemplo, de las becas, cuesta tiempo y esfuerzo recabarla. El trabajo no es tan visible como una movilización.

Hablábamos de cómo convenceríais a la gente que sabe distinguir las asociaciones. ¿Y los que no?

Básicamente les decimos lo mismo y, además, le facilitamos toda la información para que comprueben por su propia mano que todo el trabajo que hemos desempeñado ha sido efectivo. Y que ellos decidan libremente. Podemos prometerles… bueno, prometerles quizá es una palabra muy fea, pero podemos asegurarles que e trabajo será continuado después de las elecciones a Claustro. El de representante es un trabajo ingrato. Atendemos a gente que tiene un problema administrativo de cualquier tipo, como que un alumno no pueda examinarse de un parcial. Al mediar te comes el rechazo de los profesores y el agobio del estudiante. Y todo esto se hace de manera desinteresada y altruista por gente comprometida. Lo hace por creencias propias, y por eso vale la pena darle un voto de confianza.

¿Qué lleváis en vuestro programa electoral?

Desde las propuestas concretas, como el poder aspirar al 100% de la nota en la convocatoria de septiembre, generalizar los cursos de inglés, los cursos a estudiantes, las ayudas a la alimentción… Sobre todo, queremos hablar de propuestas concretas, las que tenemos, para que en ese sentido, el estudiante que no está tan movilizado vea lo que sucede en su facultad y entienda de qué forma puede sacarle renta a sus representantes. Queremos dar una imagen más cercana de la representación.

Pero, ¿qué os distingue de Reforma! o de Conecta?

Las propuestas son más concretas que las de esas dos asociaciones bajo mi humilde punto de vista. Reforma lleva varios años pidiendo lo mismo: WiFi. Vamos al programa completo: nosotros queremos la posibilidad de alcanzar el 100% de la nota en septiembre. Son cosas que a lo mejor le resultan más llamativas. Es importante tener como punto número uno llevar un programa cercano que realmente solventa cuestiones que, en particular, a cualquier estudiante de la UMA le venga bien. Mejorar el WiFi le puede venir a cualquiera, pero cuando un alumno vea que puede acceder a más del 40% de la nota en septiembre, que lo vea. Luego, el trabajo diario: durante estos dos años hemos estado ahí. Nuestra presencia es más constante. No aparecemos cada dos años. No digo que ellos lo hagan. Por otro lado en nuestra política siempre hemos practicado un rechazo manifiesto a determinadas decisiones ‘lesivas’ que afectan a los estudiantes. La respuesta del resto de asociaciones ha sido un poco tibia. Hemos rechazado medidas como el recorte en becas, enfrentándonos a todos los organismos, desde el Estado a la Junta, por su deuda con la Universidad, que provoca sus carencias. También nos hemos enfrentado con la rectora, por los precios abusivos de la Fundación General de la Universidad.

Un argumento de Conecta en contra de vuestra política es que vuestros comunicados se escapan de vuestro ámbito de influencia, que no sirven para nada.

Ese es el pensamiento del que no quiere cambier nada, o bien porque es cómplice o bien porque le da igual. Y un representante estudiantil no puede ser cómplice de medidas que afectan a los estudiantes ni le puede dar igual que echen a un alumno porque no se pueda pagar su matrícula.

Si los de Conecta son de Nuevas Generaciones, los de Reforma tienen vínculos con una fundación del expresidente del PP de Málaga, los de Eureka son…

De ningunos. Es una red de asociaciones que pretende evitar la participación de los partidos políticos. Apostamos por una representación estudiantil que no sufra la influencia externa de estos partidos. Una representación cuyas decisiones las tomen los estudiantes. Una representación que representa a estudiantes, que soluciona problemas de estudiantes, y que las decisiones las tomen estudiantes. Hay gente de UPyD en la coalición. Pero nuestras decisiones no está condicionadas por ningun partido político, por lo tanto no puedo decir que Eureka sea de alguien.

Pero sí podemos decir que otras asociaciones sí están manipuladas por un partido.

Hombre, en la medida en la que sus decisiones hablan por ellos, podemos ver algún cáriz partidista, que no político. Nosotros estamos haciendo política universitaria. Todos la hacemos. Nosotros rechazamos las tasas abusivas, las becas y a su retraso debido a las nuevas fórmulas… Hacemos política y luchamos contra que esa política sea apartidista. Nosotros defendemos una educación pública contra la subida de tasas, contra la precarización del Erasmus, contra el empeoramiento de las condiciones de los estudiantes.

¿Cómo ha sido la relación entre las tres asociaciones grandes?

Durante varios momentos, tensa. A nivel persona, recuerdo que en un periodo de exámenes, Conecta repartió trípticos con el nombre de Luis Centeno, antiguo coordinador general, que personificaban en él el problema de que las bibliotecas no abriesen más tiempo. Ese tipo de prácticas me parecen nefastas para la representación estudiantil y su imagen y para la relación entre los compañeros. Por Twitter ha habido muchas veces peleas. Pero también reivindico el roce. Somos tres asociaciones y tenemos que distinguirnos. ¿Cómo no vamos a criticar a Conecta que en el Debate de la UMA que organizó LA TABERNA GLOBAL leyó el argumentario del Ministerio para justificar que no se había recortado en las becas? Hay que debatir, siempre desde el respeto y desde la tolerancia.

¿El momento más dificil de la coalición?

Cuando perdimos Alternativa de Filosofía y Letras y AJILET, de Telecomunicaciones.

¿Qué crees que hicistéis mal?

Eran sobre todo diferencias de criterio. Se llegó a una situación en la que ellos, por cuentra propia, decidieron, de una forma normal y sin bravuconadas, de salir de la asociación. A nivel personal yo tenía compañeros, ya no te digo de AFyL, sino en genera, que han abandonado Eureka, y siempre te resulta un poco complicado. Pero si perdemos asociaciones como AFyL o AJILET, te echas un pequeño chasco y el trabajo en ese centro se ve mermado. Por suerte, hemos podido nutrir otros centros con nueva gente, pero como momento difícil destacaría ese.

Una de vuestras lanzas ha sido las críticas a las listas fantasmas.

En Eureka propusimos para el Consejo de Gobierno que se estableciese un sistema específico para erradicar las listas fantasmas, porque entendemos que es una práctica maliciosa que ofrece cargos de responsabilidad, como miembro del Claustro o de la Junt de Centro, a personas que no están suficientemente comprometidas. A personas que incluso ni les suenan de qué les hablan. Lo que queríamos era ese “amigo, ponme el DNI” para rellenar listas electorales.

Pero imagina que un amigo te hace el favor de firmar. Esa medida (además de pedir el DNI, registrarse presencialmente en secretaría en la lista) no evita especialmente las listas fantasmas.

Eso ya no es competencia de Eureka, no podemos vigilar que cada uno actúe deu na forma concreta, pero sí es verdad que establece una barrera de entrada a ese sistema. Hay que ir con el DNI a firmar y te das cuenta de que el compromiso es mayor. Creemos que es un paso más a un proceso público como son las elecciones. No tenemos la medicina para evitar las malas prácticas pero estamos aplicando pequeñas pildoritas. Esperemos que estas propuestas empiecen a salir de las secretarias y de las instituciones, y no de nosotros. Sería síntoma de que se dan cuenta del problema y lo intentan solucionar. Nosotros lo seguiremos intentando, a ver si no nos ponen un ‘recurso de anticonstitucionalidad’ (ríe). Las listas se deben hacer con personas comprometidas. Si no hay gente suficiente, no se presenta. Nosotros no nos presentamos en Económicas, en Comercio y Gestión y en Turismo. Una de las personas más trabajadoras de Epsilom, Natalia Rebollo, no ha podido ir a firmar porque estaba de viaje, precisamente en un congreso sobre representación estudiantil, y se ha quedado fuera, aún estando muy ilusionada en ir a las listas a claustro. A fin de cuentas hay que ser coherente.

¿Qué puede pasar con el Consejo de Estudiantes?

Depende del resultado de las elecciones. Si continuamos nosotros, pues después de darle vida a este organismo, de darle competencias, de darle un reglamento de régimen interno… una vez logrado todo esto, pues lograr que se convierta en un foro de encuentro, en un lugar donde se tomen decisiones relevantes. A fin de cuentas, es un organismo oficial que es más importante que lo que yo diga aquí o que lo que diga el presidente de alguna asociación. El fin es que el CEUMA sea una herramienta al servicio de los estudiantes y creemos que este periodo lo ha tenido y ahora lo tendrá mucho más, en la medida de que ahora tendrá un presupuesto, un reglamento y ahora le permitirán trabajar de forma mucho más continuada. Si no ganamos, tenemos que no se continúe con todo el trabajo que hemos hecho nosotros. Antes que nosotros había otras asociaciones, ¿os suena algo que organizase lo que era entonces el Consejo Asesor de Estudiantes?

¿Por qué se ha tardado tanto en hacer un reglamento válido para el CEUMA? Esa es la principal queja de Reforma y Conecta.

Hay varios argumentos. Uno es el burocrático. En algunos momentos, soy defensor de la burocracia como sistema defensor para evitar ilegalidades. Pero se dejo en una fecha concreta para su revisión y tardó bastante en ser develto. También es verdad nuestro propio error. Había que elaborar el reglamento, someterlo a debate, y quizá no tuvimos ni el tiempo necesario ni la celeradidad necesaria. Se hizo siempre intentando que estuviese lo antes posible, y con un contenido que sirviese de encuentro para las tres asociacones. No hemos tenido ayuda a la hora de hacer un reglamento, digamos de consenso.

Quiero que me hagas una promesa electoral que vayas a cumplir y dentro de dos años te llamo para ver si se cumple.

Te puedo decir que supervisaré el pago fraccionado. Pero claro, supervisar lo puedo hacer. Si llegamos a Consejo de Gobierno, el tema de lograr el 100% de la nota en septiembre… Bueno, hay que tene en cuenta que las propuestas no dependen solo de los estudiantes. Si me llamas dentro de dos años y resulta que en una facultad no ha querido aplicar esta propuesta y no se ha aprobado… Lo que podéis hacer es dar un seguimiento más continuo para que veais que realmente estamos haciendo las cosas.