Almorzamos con uno de los jefazos de la asociación con más presencia en Claustro en el McDonalds. Por aquello de la austeridad de los representantes del pueblo. Repasamos los momentos más candentes de la actualidad universitaria durante el pasado curso. Por Javi Skan. Fotos de Laury Muñoz.
Fernando Ureña, estudiante de Ingeniería Informática, espera sentado en el McDonalds de Teatinos con el portátil encendido y escribiendo. Hay gente que no sabe parar de trabajar, parece. Nando es el ex coordinador general de la asociación de estudiantes más votada en las pasadas elecciones a Claustro, pero nosotros preferimos llamarlo “pez gordo”, como llamamos a todo aquel del que no estamos muy seguros de qué pinta en la liosa jerarquía de Eureka. Tiene un pie en el Consejo de Gobierno, es APS (Amigo Para Siempre) de De la Calle y Perles y en su tiempo libre se lee normativas referentes a la UMA y las tuitea. Nando es una máquina todoterreno del asociacionismo estudiantil. Tiene en su cabeza el Campus de Teatinos y lo demuestra en cada pregunta, en la que te cuenta las causas, las consecuencias, los flecos, los detalles y el dramón de su prima la del pueblo. Así, es incapaz de terminar el Big Mac que ha pedido. Antes de la primera pregunta le da dos bocados grandes, porque sabe que no va a poder parar de hablar.
Nando también es incapaz de esconder una irresistible sonrisa cuando recuerda los orígenes de Eureka y cómo han evolucionado desde que ganaron las elecciones en abril de 2012 hasta ahora. “Han cambiado muchísimas cosas”, afirma. “Antes, nadie confiaba en nosotros. Ni nosotros mismos”. Los orígenes de la llamada “jaula de grillos” de la UMA remontan a una reunión de Nando con Pablo Ruiz, presidente de Reforma! por entonces, que le preguntaba por qué se había decidido a abandonar su asociación para montar una nueva. “Si sabéis que sólo vais a sacar 7 claustrales”, le dijo.
Los 29 claustrales que consiguieron son motivo de orgullo -“me venía gente con lágrimas en los ojos diciendo que habían ganado por primera vez”, recuerda-, pero Ureña reconoce que los problemas fueron muchos, fruto de intentar aglutinar a decenas de pequeñas asociaciones locales bajo una misma marca. “En muchos momentos no nos sentíamos cómodos”. Pone el ejemplo de asociaciones que, en vez de repartir las carpetas de Eureka, repartían las suyas propias. El trabajo de Relaciones Públicas internas ha sido intenso desde entonces y ahora el ex coordinador general saca pecho por el trabajo realizado. “Somos un equipazo”, dice.
Sin embargo, los jefazos de la asociación más votada no han logrado evitar la tensión, las broncas públicas y, finalmente, la marcha de Alternativa Filosofía y Letras de la coalición y la separación de bombas. Durante la asamblea previa a la huelga del 9 de Mayo, representantes de esta asociación acusaron a Eureka de no secundar la convocatoria y de no apoyarla con la suficiente intensidad. Lo primero no es cierto, lo segundo sí. “Pudimos hacer más”, llora desconsoladamente Nando, mientras se seca los mocos en la blusa de la fotógrafa y un servidor aprovecha para comerse las patatas. De esto absolutamente nada es cierto, menos la autocrítica.
Ureña aduce al estrés de los exámenes y el desgaste de haber organizado una huelga en marzo. “Avisamos de que hacer una huelga iba a quemar, y ellos estaban conformes”. Cuando fue el turno de organizar la de mayo, la actividad de Eureka fue muchísimo menos intensa. No se hicieron pasaclases y no hubo apenas movimiento en redes sociales. Seguidamente, ataca: “Hay mucha gente que querría estar en nuestro lugar y tirar del carro [de las movilizaciones contra los recortes], pero se equivocan al hacer las cosas”. Se refiere a la presencia de banderas de tinte político en las manifestaciones, que grupos como AFyL defiende sin fisuras. Nando reconoce la complejidad del tema. ¿Libertad de expresión o evitar que los asistentes a las concentraciones sientan que ese no es su ambiente? Además, para Ureña existe una diferencia en la manera de trabajar en las huelgas. Ellos le dan más importancia al trabajo previo de difusión, y AFyL prefiere el trabajo durante el mismo día. A pesar de estos roces y de que la separación ya se ha hecho efectiva, el miembro de Eureka afirma que la tensión entre ellos y Alternativa es mínima por el momento.
La conversación vira hacia un repaso de todos los momentos tensos que las asociaciones y en particular Eureka han vivido este curso. Sin duda, lo que les dejó más de una noche sin dormir es el tema de las becas. Además de la reducción de las cuantías y del número de estudiantes agraciados con ellas, la UMA enrareció el ambiente exigiendo el pago de la matrícula a los no becados con una semana de antelación. Ante ello, las asociaciones respondieron en masa, publicando guías sobre cómo alargar el plazo y ayudando a todos los estudiantes que lo solicitaban a solucionar su papeleo a tiempo. “No hubo una presión externa”, afirma Nando, la decisión de pedir el dinero “fue una cosa de la UMA” y de su falta de liquidez, si bien la justifica en parte recordando que el Vicerrectorado de Estudiantes no canceló la matrícula a los morosos. Nando nos cuenta las palabras que oyó en un evento convocado por un medio mexicano, de parte de un hondureño que dijo que “somos representantes, pero en realidad nosotros no representamos a nadie”. A Ureña esa frase se le quedó grabada, y la repite, y la explica. “Decía que no podía saber lo que sentía una mujer que acababa de tener un niño y no tenía dinero para sacarlo adelante. Podía saber que estaba desesperada, pero no podía sentir esa desesperación”. Ureña utiliza ese ejemplo para concluir que “ante esa falta de información, lo que hay que hacer es preguntar a quien está pasando por esa situación. En vez de tomar decisiones basándonos en lo que creemos”.
El parón universitario ha sido otro de los temas calientes durante el curso 2012/2013. Eureka propuso regular el derecho a huelga en la UMA. Quien quisiera protestar sin ir a clase podría hacerlo sin temor a represalias de profesores, según lo que propusieron, pero la iniciativa fue tumbada en el Consejo de Estudiantes con los votos de Reforma! y Conecta. Nando no entiende lo que pasó. “No se pretende un parón universitario como el de Sevilla, que si los estudiantes están de acuerdo, las facultades se cierran con candado”, explica. “El derecho de los estudiantes que no querían huelga no se veía amenazado. En la comisión de estatutos explicamos a Conecta y a Reforma! la diferencia. Cuando oí sus argumentos en el pleno, no me lo podía creer”. ¿Y cuáles son las causas de que votaran en contra? “Quizá fue una decisión ideologizada. Quizá fue porque las elecciones están cerca. No sé”.
Y es que la relación con el resto de asociaciones ha tenido sus más y sus menos, al tratarse de un año muy intenso. Sólo hay que echar un vistazo a esta lista y bucear un poco para encontrar auténticas batallas campales. La relación de Eureka con la mayoría de miembros de Reforma! es buena, según Ureña, y con Conecta “había buen rollo hasta el pleno del Consejo de Estudiantes en el que nombramos persona non grata a Wert”. El último affaire con ellos, cuando Conecta los acusó panfleto en mano de no haber trabajado en pos de que las bibliotecas abrieran más horas -pudimos hacer más, pero lo que pusieron en el panfleto era mentira, dice el ex coordinador- terminó de separar a las dos asociaciones y unió a Eureka y a Reforma! bajo el pensamiento de “jo, cómo se han pasado”. A Nando se le nota el cariño que siente por algunos miembros de la asociación ex gaviotil. “A pesar de nuestras riñas, somos amigos. Tenemos más cosas que nos unen que cosas que nos separan”.
Un año en el que ha sorprendido gratamente el renacimiento del Consejo de Estudiantes. “Cuando operábamos a nivel facultad, y veíamos que podíamos cambiar cosas, sentimos que teníamos que dar el siguiente paso. Había problemas que no se podían solucionar en Junta de Centro”, explica Nando sobre el CEUMA, máximo organismo de representación estudiantil de nuestra Universidad, y que tras la votación en la que Eureka se posicionó como fuerza dominante pasó de ser un órgano consultivo a tener poder para tomar decisiones. Ureña explica la importancia de un movimiento estudiantil fuerte con un sencillo ejemplo: antes, los estudiantes teníamos derecho a barrilada. Ese derecho se eliminó antes de que el propio Nando entrara a la UMA. “Si algún estudiante hubiera estado allí y hubiera defendido ese derecho, probablemente no se habría eliminado”. Nando habla de un pasado en el que los alumnos que asistían a Consejos de Gobierno o Consejos Sociales no alzaban la voz y no retransmitían lo sucedido. Un pasado en el que De la Calle y el Vicerrector de Estudiantes sólo conocían a uno o dos representantes de alumnos.
Sin duda la gestión de la Universidad de Málaga se ha democratizado en el ultimo año, en contraposición al desinfle del movimiento contra los recortes en Educación. Preguntado sobre las causas, Nando no se corta un pelo. “Los que estaban en el 15-M Universidad ya no siguen involucrados”, acusa. “Pero mucha gente, sin estar dentro de Eureka, se sigue moviendo, los veo trabajar diariamente”. Recordando el curso 2011/2012, donde la UMA parecía que iba a arder de un momento a otro y todos los miércoles había encierro en Psicología, Nando saca el cuchillo hablando de las asambleas semanales, promovidas por el 15-M el año pasado. “A nosotros nos gustaban mucho los encierros. Pero decidían un montón de cosas, no hacían nada, y se iban para casa contentos”.
Después de una hora y media de toma y daca, el ya miembro de Eureka se relaja hablando de las nuevas generaciones de su asociación. “Tenemos el futuro asegurado”, nos confirma con ilusión. Y es que el todoterreno Nando Ureña no puede estar al pie del cañón por siempre, que luego La Razón te saca en portada y la tenemos liada. La conclusión va por el mismo camino que las confesiones que iniciaron la entrevista. “Necesitamos un descanso. De verdad”. Al menos nos deja con la certeza de que tendremos asociacionismo estudiantil para rato. Que así sea.
McDonalds Málaga Universidad
Menú Big Mac con patatas medianas y Nestea: 5,85€
McFlurry con Filipinos y chocolate blanco: 2,45€
Total: irrelevante, porque cada uno se pagó lo suyo.
Nando Ureña, ex coordinador general de Eureka: "En realidad no representamos a nadie",Acerca de Javi Skan
Anarcosindicalista. Igualdad, fraternidad y socialismo. Me duele la cara de ser tan GRAPO. ¡Venceremos! No, es broma. Dirijo este medio mientras hago como que me intereso en mi último año de Periodismo en la UMA. Vuestras opiniones me parecen una mierda.