La chispa prende en Filología Clásica: Antonia 2012

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Negras tormentas agitan los aires, nubes oscuras nos impiden ver. Aunque nos espere el dolor y la muerte, contra el enemigo nos llama el deber. ¡A las barricadas, a las barricadas!

A lo largo de la historia de la Humanidad tenemos numerosos ejemplos de discursos y manifiestos que lograron levantar a todo un pueblo, remover conciencias o producir un profundo cambio político. No, no me refiero al blog de Democracia Real Ya. Hablo de Marx, Zola, Milton, Mandela. Y ahora, una fuente reservada de La Taberna Global, estudiante de primero de Filología Clásica, ha iniciado el camino hacia la emancipación. Cómo no, en Filosofía y Letras. Nosotros ya lo avisábamos. Un tablón de Tuenti, red social que viene a ser como el soviet supremo del alumno de la UMA, ha sido testigo de este manifiesto que pretende que nos concienciemos de la crueldad de un docente que seguro que no será el único. Con todos ustedes: Antonia 2012. Difúndelo.

¿Azar o educación?

-La universidad representa un gran cambio con respecto a las instituciones anteriores por las que nosotros, los estudiantes, hemos pasado. Los estudios superiores son de libre elección y por ello podemos optar o no a cursarlos, hasta este punto, creo que todos estamos de acuerdo.

Alzad los puños, camaradas

El autor del texto, como buen orador, mantiene la intriga. ¿A qué se referirá? Qué suspense. Sigamos.

¿Qué ocurre? 

Es comprensible que en la transición institucional no recibamos ningún tipo de ayuda por parte del cuerpo docente, pero lo que es inadmisible es que se obstaculice el cambio de tal forma que sea imposible que los estudiantes consigan sus objetivos en su totalidad.
¿No os ha ocurrido eso?

Con las alusiones al público, el manifestante se gana su confianza y atención. Brillante técnica. Expuesta la hipótesis, pasa a desarrollar la denuncia.

Básicamente, cuando entras en la universidad ya comienzan los comentarios típicos del profesorado (que tanto hemos oído) como “vais a tener que buscar la bibliografía” o “vais a tener que buscar la información”, realmente eso favorece nuestro trabajo reforzando la satisfacción y el esfuerzo.
Sin embargo, es asombroso como a este nivel educativo puede haber personas incompetentes que “dan clase” si se puede llamar así, puesto que al final los estudiantes terminan con aproximadamente novecientas hojas de apuntes de las cuales probablemente no les sirva nada, puesto que el profesor/a no ha dejado claro que información es la necesaria en cada y en qué parte del temario se sitúa.

No es permisible el hecho de no contar el porcentaje prometido referido a trabajos y actitud en la nota final del alumno, tampoco es permisible el hecho de obviar parte del examen centrándonos a la hora de corregir en tan solo la primera pregunta, de la cual has recibido su contenido dos semanas antes del examen final comprendiendo inexorablemente que esa información masiva formará parte del examen que se aproxima rápidamente. 

Quizás haya alumnos con una nota que roza el aprobado e incluso que estén aprobados, a pesar de ello, hay profesoresen la universidad de Málaga que utilizan sus propios métodos de corrección sin poner en aviso a sus alumnos previamente perjudicándoles en gran medida y provocando el fenómeno de “suspenso en masa” que tanta alegría otorga a algunos docentes.Como vemos, la ira se ha adueñado de nuestro pequeño Lenin. Varias son las acusaciones: excesiva carga de apuntes inservibles, criterios de corrección inadecuados, improvisación… sólo le falta añadir  “y encima la sinvergüenza da clase”. Pero enseguida vuelve a la calma, para afirmar:

Para finalizar me gustaría añadir que hay profesores excelentes, de vocación, que realizan su trabajo de forma excepcional y por eso espero encontrar algún cuatrimestre un profesor de tales características por materia, y no seudónimos de docentes cuyo fin es “tener la barriga repleta” otro mes más.

 En los tiempos que corren, si quieres hacer famosa tu protesta, tienes dos opciones: o te quemas a lo bonzo o te inventas un hashtag. Las RRSS son el elemento clave de la primavera estudiantil, y la injusticia ha tenido eco concretamente en Twitter, donde #antoniadimision hace furor al ritmo de un tuit cada dos días.

Los estudiantes de Filología Clásica ya están despertando. ¡Levántate de esa especie de silla demasiado separada de la mesa y lucha por tus derechos! Si tu profesor o profesora tiene hilarantes tics al hablar, llega tarde, ignora el temario si es demasiado corto y lo sigue al pie de la letra si es demasiado largo, se queda con los clips de los trabajos o ha ganado el primer premio en un recital de PPTs, ¡actúa! ¡Indígnate! ¡Quema contenedores, esa es la solución! Bueno, quizá lo más útil sea rellenar las encuestas de calidad del profesorado o presentar una instancia. Pero no lo nieguen: eso es menos divertido.

Si tu historia es similar a la de los chicos de Clásica y quieres que la comunidad universitaria conozca tu caso, ponte en contacto con nosotros.

 

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Acerca de Javi Skan

Anarcosindicalista. Igualdad, fraternidad y socialismo. Me duele la cara de ser tan GRAPO. ¡Venceremos! No, es broma. Dirijo este medio mientras hago como que me intereso en mi último año de Periodismo en la UMA. Vuestras opiniones me parecen una mierda.

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