Shabu presenta su nuevo disco rodeado de los pesos pesados del hiphop andaluz.
Rafael Cabrera, Shabu, se esconde bajo la aterciopelada capucha negra de su chándal minutos antes de comenzar el concierto. Está nervioso. Y no es para menos. La Sala Paris15 es un hervidero de amantes del hiphop, el dancehall y el reggae que han venido a disfrutar con la música del nerjeño de mirada azul y tímida sonrisa. El cartel anunciaba “una noche histórica”, y no se ha quedado lejos. Saturnino Rey de SFDK, ElPhomega, Gordo Máster de Triple X, Zuri, El Niño de la Guitarra y Little Pepe, entre otros, han acompañado a Shabu en la presentación de su disco “La Cura”, 16 canciones que parten del reggae y el hiphop mezclándose con dancehall y electónica.
Shabu (FOTO: Carmen Mateos)
La temperatura comenzó a subir con “Unifyah Youths Sound”, dos malagueños que desde la mesa de mezclas se marcaron una sesión donde predominaron los beats jamaicanos. Shabu, apartado en las sombras del backstage, miraba nervioso hacia el escenario a la espera de entrar en acción. Y con puntualidad contraria a la inglesa empezó a cantar “Como un bandolero”, seguido de “Keep me original”, los dos primeros temas de su último trabajo de estudio.
Entre “Mercaderes” y “Mama África” el concierto avanza. Mientras, flashes e iPhones no cesan de apuntar a Rafael. Quizás con la intención de inmortalizar los buenos momentos que les estaba brindando. Zuri, patriarca del reggae aflamencado, sube a las tablas, guitarra en mano, para cantar junto a Shabu “Quédate aquí”, una canción que deja entrever la vena flamenca que recorre el cuerpo de Zuri, polifacético artista que además de cantante y compositor es productor. Pero para flamenco, “El Niño de la guitarra”, artista que pone música al “Arca de Noé”, uno de los temas más populares de Shabu.
Shabu y El Niño de la Guitarra (FOTO: Carmen Mateos)
Juho colabora en “Luz de Luna”, el tema más experimental de “La Cura”, las reminiscencias dubstep de esta canción da importancia a los graves que contrastan con guitarras eléctricas y delays. El rapero que creó una nueva forma de componer, ElPhomega, aparece y entona las pegadizas rimas de “Stardust”, de su álbum “Phantom Pop”, un tema en el que Sergio Albarracín nos muestra su lado más sexy con una letra que corrobora que ‘no hay mil como él, ni cien como él, ni diez como él’.
Shabu y ElPhomega (FOTO: Carmen Mateos)
El ecuador ya está pasado, y Shabu, que no ha dejado ningún estilo sin contemplar, sigue caldeando el ambiente. Un ambiente impregnado por el sudor colectivo que desprenden las más de 300 almas que se apiñan para cantar cada estrofa que brota de su versátil garganta. Su compañero de ‘Pinnacle’, Little Pepe, entra en escena para quedarse. “S.O.S”, “Conocen este flow” y “Nada cambia” son tres de los temas que el pequeño Pepe de alargadas rastas y pícara sonrisa canta junto a Shabu.
Little Pepe (FOTO: Carmen Mateos)
El cabeza de cartel lamentó que Sicario y Capaz no pudieran acompañarle, pero no le importa. “Ha venido el Gordo Máster de Triple X, que vale por dos”, comenta Shabu y el público ríe. El Gordo se despacha como alma que lleva el diablo en dos canciones que se incluyeron en el setlist sobre la marcha. Y con el setlist apunto de acabarse, el respetable enloquece cuando observa como irrumpe en el escenario con fuerza Saturnino Rey, de SFDK. ‘Zatu’ elogia la música de Shabu y así lo dejó claro cuando dijo “yo a este tío lo escucho en mi casa”. Un remix de ‘Vívelo’, y la canción ‘Mi medicina’ ponen la guinda final a las colaboraciones.
Saturnino Rey de SFDK y Shabu (FOTO: Carmen Mateos)
Mañana dará el salto al charco para hacer una minigira de cuatro actuaciones en el Distrito Federal de México. Shabu ha apuntado alto con este cartel y no ha defraudado. Conquistando retractores y sumando adeptos, el tímido chico de mirada azul y sonrisa profident lo ha demostrado esta noche: ha llegado para quedarse y curar nuestras almas con lo que mejor sabe hacer: la música que le sale del corazón.
CARMEN MATEOS | @La_Gataperra
Acerca de Carmen Mateos
Estudiante de periodismo y fotógrafa de profesión. En mis ratos libres soy la bajista de un grupo que sólo existe en mi mente, el cual aderezo con agracio versionando clásicos del punkrock internacional
