Tras dar vueltas y vueltas en el polígono Guadalhorce, La Taberna Global se presentó en el local de ensayo de Santos de Goma. Allí, entre hebras de tabaco de liar, latas de cerveza y un póster de una chica enseñando sus pechos (seguramente para parecer unos machotes) conseguimos entablar una buena conversación con el grupo malagueño. Además, podréis disfrutar del tema “Cuando sea mayor” en La Taberna Sonora próximamente.
FOTOGRAFÍA: Laura Muñoz. TEXTO: Luis Sánchez.
Santos de Goma
¿Cómo empezó vuestra andadura musical? ¿Por qué decidisteis formar el grupo?
Ojú… (risas). Por equivocación, como todo. Yo a estos los conozco desde hace menos, pero a Conde que tiene una discográfica en Málaga desde hace unos diez años, un poco más. Yo tenía un grupo y sacamos un disco con su sello. Eran todos grupos de Málaga. A raíz de eso sacamos un disco con otra banda que tenía yo y bueno, a partir de ahí, de que esa banda se disolviera, pues empezamos a trabajar en diferentes proyectos, en diferentes cosas y hasta que hemos llegado aquí. Son diez o doce años. La banda como tal comenzó allá por el 2006.
¿Qué hace ahí el de “I´m sexy and I know it”?
¿De dónde proviene el nombre? Acaso, ¿os consideráis santos y de goma?
Eso fue una historia curiosa. Uno de los miembros fundadores y yo trabajábamos en una empresa de publicidad pero la agencia era una mierda y teníamos unos clientes muy cutres, así que decidimos inventarnos una cartera de clientes e hicimos una campaña para cada uno de esos clientes inventados, y uno de ellos era una empresa de santos de goma para que los niños los echaran a pelear: San Pedro contra San Pablo y esas cosas. Tiempo después, cuando ya no trabajamos allí porque era tan cutre que se fue a la mierda, nos acordamos del nombre, nos pareció divertido y casi una broma.
¿Vivís de la música o lo compagináis con otro trabajo?
Hay de todo. Yo vivo de esto a duras penas. Sobrevivimos mejor dicho.
¿Qué podéis contarnos sobre la experiencia que vivisteis al rodar el nuevo videoclip “Té y desilusión”? Es muy vintage y retro, ¿os consideráis unos modernos?
(Risas) ¿Modernitos? Somos muy mayores, nos han dicho de todo pero modernitos ya… Vintage puede con los instrumentos y los amplis.
¿Cómo fue la grabación al mando del cineasta malagueño Biktor Kero?
Nos lo pasamos muy bien, y estamos muy contentos con el resultado. Estuvimos tres días de rodaje, fue bastante intenso. Biktor es una persona que tiene las cosas muy claras a pesar de ser tan joven. Tiene una cabeza de cineasta, estaba todo bien organizado, lo hicimos sin apenas presupuesto, y en el resultado no se nota. Al final creo que al divertirnos nosotros la gente que lo ve también lo hace. Además, tiene esa doble lectura de reírnos de nosotros mismos y de que la gente también piense.
¿Qué expectativas tenéis respecto a este nuevo proyecto? ¿En qué se diferencia fundamentalmente del primero? ¿Alguna novedad: colaboraciones, instrumentación innovadora, sintetizadores?
Las incorporaciones han ido llegando poco a poco. Primero llegó José, un músico nuevo siempre ayuda a la regeneración, y además tiene una forma de tocar muy personal que le dio un nuevo enfoque a las canciones. Luego Ale después, pero lo hizo con el disco ya grabado, y Miguel, que es el último en incorporase, hace dos o tres meses. Siempre que grabamos disco perdemos gente, es una constante. Esperemos que en el próximo no se vaya nadie.
Contadnos brevemente cuales son los ingredientes principales en vuestros conciertos, ¿más espectáculo que humor? ¿Mucha interacción con el público?
Bueno, a mí me gusta bromear aunque las canciones tampoco sean la alegría de la huerta. Pues no hablo demasiado, pero sí que me gusta jugar con la ironía, presentar los temas, creo que todos tenemos una forma distinta de hacerlo y todas son válidas.
¿Esas historias que contáis en las canciones están relacionadas directamente con algunas vivencias propias?
No necesariamente, porque las canciones no cuentan una historia muy definida. Son canciones sinceras y personales pero contadas de una manera poco habitual. No me gusta contar una historia como si fuera un cuento. Me gusta jugar con la fantasía y dejar que el oyente pueda sacar su lectura. Aunque yo sé muy bien lo que cuento, a veces la gente entiende una cosa totalmente diferente, y me parece estupendo.
¿Qué os ha suscitado la subida del IVA en algunos productos culturales?
Hombre, con lo fáciles que están las cosas imagínate. Si se le añade a lo complicado que es irte a tocar a una sala, o hacer una obra de teatro y llenarlo… Imagina. Es inviable. O sea, van a conseguir recaudar mucho menos, porque todo el mundo va a hacer las cosas por debajo de la mesa, y es normal. Porque no se puede pagar un 21% de IVA, más un 10% de autores… Al final no hay dinero, y el pastel es ya muy pequeño. De todas maneras, yo pienso que es algo orquestado para acabar con un sector de la población bastante modesto.
En una entrevista hecha al periódico Sur, dijisteis textualmente: “Los 80 fue la última época en la que podías escuchar buena música en la radio. Ahora es tremendamente aburrida y repetitiva”. ¿Pensáis que podéis ser esos mecenas que vuelvan a renovar la escena musical española?
Uy no, nosotros solo hacemos canciones. Intentamos divertir al público, no hacer una labor social, bastante tenemos con lo que tenemos. Que piense un poco, pero tampoco obligamos a nadie a nada. 
¿Cómo recordáis vuestra participación en el BKFest 2011?
Pues muy bien, la verdad. Perfecto, organización perfecta, todo muy bien. El espectáculo de Standstill pues la verdad que fantástico.
¿Os consideráis unos hijos del pop? ¿De qué otras fuentes bebéis?
(Risas). Bueno, yo creo que cada uno tiene su propia discoteca personal. Yo personalmente soy partidario de la música antigua, de los ochentas, de los sesenta, de los cincuenta… Y no solo anglosajona, sino también francesa… En fin, soy bastante friki para eso. Lo que más me gusta es el pop.
Entonces, ¿tenéis pensado hacer alguna canción en inglés, francés…?
Sí, ¿por qué no? Estamos abiertos a todo, de hecho grabamos canciones en inglés y francés, algunas covers. Y en inglés hace años que he grabado, incluso en portugués. Nos encantaría, pero me gusta escribir bien en mi idioma, porque lo domino, pero es difícil escribir en un idioma en el que no piensas, porque al final siempre tienes que estar pensado cómo se hace la adaptación de un idioma a otro. Trabajo en español no porque me parezca peor o mejor, sino porque me permite expresarme con mayor profundidad.
Con tanta explosión denominada “indie”, ¿vosotros os consideráis una formación de ese tipo?
Bueno, no nos consideramos de una manera o de otra, pero si estamos más cercanos a los indies, por nuestra forma de hacer la música, por el estilo de música que tocamos. No somos una banda de rock realmente. Me interesan otro tipo de cosas, el rock me aburre mucho, es repetir esquemas, hay poca labor de investigación. Sí, digamos que somos indies, pero somos los abuelos.
Si os fichara una de las grandes discográficas, del tipo EMI, la cual os produjera un álbum, os promocionara y os pagara una gira completita a cambio de modificar la imagen de Santos de Goma, ¿aceptaríais?
Depende, si tenemos que hacernos un cambio de sexo igual no (risas). Si me ofrecen un sastre chino pues igual sí. No lo sé. Normalmente esas cláusulas no existen, hay mucha leyenda urbana. Además, las discográficas grandes ahora ya no son nada. Y ahora no pueden imponerte nada. En otro tiempo sí podían hacerlo, ni en los ochentas ocurría. Si fichan a un artista lo hacen por lo que es, y si no hacen un artista a su medida. En compañías que antes podían haber 200 personas por departamento ahora hay diez, porque no se venden discos, y porque están igual de perdidos que los demás. La empresa discográfica tal y como la conocemos en España está llamada a desaparecer. El que manda es el público: si el público compra discos, hay empresa, si no hay público que compre, no hay nada. La gente prefiere invertir en un gin tonic. Si la cosa no cambia no podremos hacer otra cosa, a parte de emigrar.
Hablando de esa explosión “indie”, ¿qué opinión os merece grupos y cantantes como Love of Lesbian, Vetusta Morla, Supersubmarina, Zahara, Anni B. Sweet, Sidonie?
Buenos grupos, panorama que está ahora en el candelero. Anni B. Sweet es malagueña también, y bien. A mí me gustan todos, unos más otros menos, pero me parece bien.
¿Se os podrá ver próximamente en algún concierto o evento?
El día tres estaremos en el Muelle 1.
Alguna banda con la que os identifiqueis y porqué.
No lo sé realmente, pero hay grupos que beben de la misma fuente que nosotros, como Sidonie, quizás alguno más. Nosotros realmente no tenemos patrón, no seguimos una línea. Vamos investigando un poco, esa es la filosofía del grupo. Seguramente nuestro próximo trabajo será muy diferente a este, no sé cómo será, pero nosotros siempre estamos investigando. Nos parece pobre ceñirnos a algo, nos parece aburrido. Preferimos los retos.
¿Podéis contarnos alguna anécdota que os haya ocurrido en algún concierto?
Yo fui a un concierto con un brazo biónico, recién salido de una operación (risas), fue en el Fuengirola Pop Weeken, y me rompí el tendón. En el Monkey Week dimos un concierto el sábado y otro el domingo, y entre medio de los dos me dio un cólico nefrítico, e hice el concierto luego. Y otras muchas que no se pueden ni deben contarse (risas ahogadas).
Después de tantos conciertos y festivales a las espaldas, ¿cómo recordáis ahora vuestro primer concierto?
Tocamos en la Sala Gades, estuvo muy bien. Fue en marzo o abril de 2007. Lo pasamos bien, vinieron muchos amigos y pasamos bastantes nervios. Hace unos cinco o seis años.
¿Dónde os veis en un futuro no muy lejano?
Haciendo música, yo tengo más pasado que futuro. Me da igual, espero que este proyecto nos dé muchas alegrías, pero a veces las cosas no salen bien y hay que empezar proyectos nuevos. Estamos acostumbrados a ello, pero es uno de los mejores proyectos que hemos tenido. Es una carrera de fondo y hay que trabajar cada día.
¿Pensáis llevar a cabo actuaciones a nivel internacional?
Si surge claro que sí. Nosotros como cantamos en español… Cada vez el mercado está más abierto. Europa ya no es un lugar cerrado, pero nuestra mirada está más enfocada a Argentina, Sudamérica en general. Si no es un mercado global es muy difícil.
Nos hace gracia el concepto de músicos por encargo de vuestro vídeoclip. ¿Compartís esa noción hoy en día viviendo en un mundo cada vez más globalizado e inmediato? ¿Qué es para vosotros el concepto “se vende músico”?
El concepto era de Biktor, lo que pasa que lo compartimos al 100%. La música en los momentos que hay más música, está en todas partes, hace que pierda valor. Al ser tan sencillo acceder a ella la gente no lo valora. Piensan que sale de ahí y ya está. Antes te comprabas un disco y tenías que currártelo, oírlo una y otra vez hasta que te gustaba, por el dinero que costaba. Siendo ahora inmediato, al poder acceder a artistas de todo a mano, es como bueno, esta canción no me gusta paso a otra, me bajo una discografía por ejemplo de The Rolling Stones en dos horas y no se puede valorar una carrera de cuarenta años en dos horas. Es un reflejo de lo que somos ahora, somos impacientes. La gente escucha música mientras trabaja o está con el ordenador. La música pierde valor cuando se convierte en el tono de un móvil.
Ya que os intentáis ganar la vida como artesanos de melodías y cánticos, ¿cómo sería un día sin música en vuestras vidas?
A veces se da uno un descanso, igual a los músicos nos costaría menos, puesto que vivimos rodeados de ella. Agradecemos un día sin música. Es más difícil para el resto de personas estar un día sin música que para los propios músicos. Nosotros trabajamos en la música, a veces el domingo dices: “Se acabó, apago la radio, la tele y el móvil”.
Acerca de Luis Sánchez
Filología clásica en la UMA. Amante de la música, museólogo en creación.
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