Desconsolada, aunque con una sonrisa torcida, Adelaida de la Calle nos recibe para trasmitir la pena que siente por no seguir siendo presidenta de la Asociación de Universidades Públicas de Andalucía.
Entre empanadas, huevos rellenos, tortillas de patatas y salchichón, nos abría los brazos (y el piso de uno de los jefes) Adelaida de la Calle. Sin embargo, a pesar de su ojo sonrisa de medio lado, resentida a la vez que alegre, algo no iba bien para nuestra diosa omnipotente.
Con lágrimas en sus acartonados ojos nos confesó el ultraje que suponía su destitución como presidenta de la Asociación de Universidades Públicas de Andalucía (AUPA), pasando a contarnos desvividamente su historia.
El pasado 17 de diciembre, el Rectorado de la Universidad de Málaga (UMA) acogió a la directiva de esta asociación, a la que asistieron los rectores de Córdoba, José Manuel Roldán; Sevilla, Joaquín Luque; la Universidad Internacional de Andalucía, Juan Manuel Suárez Japón; Huelva, Francisco José Martínez; Pablo de Olavide, Juan Jiménez; Jaén, Manuel Parras; Almería, Pedro Roque, y Granada, Francisco González, y por último ella, en su papel de presidenta saliente.
Con el objetivo de renovar la directiva de esta asociación y por una unanimidad aplastante, fue el rector de la Universidad de Córdoba, José Manuel Roldán, el elegido para sucederla en el cargo que presidía De la Calle desde hace cuatro años.
Aunque los asistentes agradecieron el trabajo realizado por la ilustrísima De la Calle, ésta se mostró un tanto reacia a lo establecido en la planificación conjunta del próximo año, pues teme, como nos contó, que se supriman vitales actividades como el Trofeo Rectora o las Jornadas sobre Neurociencia Afectiva.
Tras haber sido reelegida en las elecciones a Rector de la UMA, ser consejera de Universia, presidenta de la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE), recibir la Medalla de Oro de la Universidad de Sevilla en 2010 y de contar con su propio espacio en Wikipedia; Adelaida quería mantenerse en el poder. Conquistar cada rincón para dejar su esencia. Normal que, con todos sus cargos, no tenga tiempo de tuitear desde el 2 de diciembre, día de las elecciones…
Al final de la noche, apenada, pero con ímpetu juvenil, Adelaida, nos aseguró tras un trago a su zumo de granada y uva (mensaje subliminal de cuál será su próxima área de colonización), que pelearía por lo que quiere para ella la UMA. Mientras tanto, y ya no sólo para sentirse parte de la comunidad universitaria, se marchó a ahogar sus penas en el Ágape. Pero como La Taberna Global es tan comprensiva no dudó en alegrarle el resto de la fiesta con mimos y caricias.
Ultraje a Adelaida de la Calle,Acerca de Inmaculada Montes
Como dijo el coronel Buendía: "Aquí, esperando que pase mi entierro". La lluvia de Londres me tenía hasta el moño y me volví a Córdoba. Mi experiencia en LTG me ayudó a entrenarme para El Mundo Málaga, pero he vuelto a mis raíces.