Las marionetas reinventan ‘La venganza de Don Mendo’

Publicado por
La productora ‘El Espejo Negro’, bajo la dirección de Ángel Calvente, se ganó las risas del público gracias a la adaptación tan peculiar de la obra de Muñoz Seca.

Poco espacio se reservaba en el escenario del Teatro Cervantes, donde los focos permitían ver tras las marionetas sus sombras proyectadas. Un detalle que en algunos momentos de la obra era digno de apreciar, otra perspectiva digna de apreciar en algunos momentos. La atmósfera musical, visual e interpretativa daba pie al comienzo. Desde el primer intermedio entre escenas  se observaba que el aspecto musical estaba cuidado al detalle y la voz de Raphael sonaba en el Teatro con trasfondo cómico, levantando el ambiente sin premisas. Llegado el momento de la trama en cual Don Mendo se halla encerrado aparece la comitiva de la boda de Magdalena con Don Pero. Ésta iba vestida cual Reina Amidala de Star Wars, con Doña Ramírez intentándose asemejar a Chewbacca. Toda esta aparición con la marcha imperial de fondo.

donmendo4

Don Mendo momentos antes de ser traicionado por Magdalena.

Momentos después, Don Mendo daba el cambiazo en su celda para no quedar emparedado, dejando un muerto en su lugar y escapando con la ayuda del Marqués de Moncada, los cuales se disponen a tramar la venganza. Suena “Thriller” de Michael Jackson. Al momento, se recrea un baile que resucita a la marioneta que yace en lugar de Don Mendo. Tras dos intermedios, la voz de Raphael anticipa la aparición del Rey de Castilla. Su aparición en escena a grito pelado hace reír de manera fortuita a los asistentes.

Ya en la cueva característica de la trama, las ironías del diálogo estaban servidas. La mora Azofaifa, aguardando su particular venganza, termina observando la cita clandestina de Don Mendo y la reina Berenguela, que acaba en coito entre las marionetas (literalmente). Al irse ésta, don Mendo, cual triunfador mujeriego, exclama: “¡Ay qué calor… qué guapo soy, qué tipo tengo! Toma que toma tá”. Toda la obra estuvo llena de guiños a la cultura española, pues cuando Don Pero se clava su propia espada y exclama “mirad como muere un toro” suenan las cornetas típicas de la lidia de plaza acompañado de un ‘Oleee’ de fondo cantado por los actores. El final de la obra acaba en tragedia con la muerte de todos los protagonistas. Parece que todo llega a su fin, pero el espectáculo continúa con los actores en movimiento que viéndose envestidos por un helicóptero, los ametralla y éstos también mueren junto a las marionetas que dieron vida.

VN:F [1.9.22_1171]
Rating: 0.0/5 (0 votes cast)
Share Button

Acerca de La Taberna Global

Soy una web. ¿Qué más quieres?

Comentarios:

¡Da tu opinión!

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

* Copy This Password *

* Type Or Paste Password Here *

Puedes usar las siguientes etiquetas y atributos HTML: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <strike> <strong>