La Universidad de Málaga se ha visto envuelta en los últimos días en un caso de presunta estafa. Y no es que hayan timado a Adelaida en el chino de su barrio con un tinte novedoso, sino que han ido a por nosotros, los alumnos. Una técnica sencilla, a la par que antigua, como la de los SMS, ha sido el cebo para intentar ahorrarnos unos eurillos en la matrícula y más después de todas las ayudas puestas en marcha por parte de Rajoy y Wert.
Una vez comenzado el curso, los estudiantes de la UMA han podido recibir en su bandeja de entrada un correo como este:
Este e-mail nos invita a participar en el sorteo de 20 matrículas gratis y nos enlaza a una página web que aparentemente podría parecer perteneciente o relacionada con la UMA, ya que en el banner superior aparece una foto de la facultad de Psicología y ciencias de la Educación. En realidad es una pequeña trampa, ninguna de las pestañas o accesos del site nos llevan a ningún otro sitio que no sea esa misma página, cuya finalidad es rellenar una “encuesta sobre el nivel de la calidad y satisfacción de la enseñanza en el sistema educativo español”. Y como a todos nos encanta criticar, se convierte en un atractivo caramelo.
Una vez rellenado el formulario con los datos, que “han de coincidir con los que proporcionó a la hora de matricularse”, pasaremos a recibir un código en nuestro móvil que deberemos insertar en la web y es ahí donde ya habríamos sido estafados.
Ese código nos da de alta en un servicio de suscripción premium. Para todos aquellos estudiantes de magisterio que no sepan lo que es, solo hay que leer las bases del concurso, una cosa que deberíamos hacer al registrarnos en cualquier cosa en internet, pero que nadie, absolutamente nadie hace y que sí ha hecho La Taberna Global en su ardua labor de investigación. Este servicio permite suscribirte y recibir de manera periódica una serie de SMS en tu móvil, cada uno con un coste de 1,45 € (eso sí, no más de 30 SMS al mes y con el IVA incluido, que no son tan cabrones). A esto hay que sumarle que si nosotros respondemos alguno de esos mensajes también se nos cobrará 1,45 €. El proceso del concurso es el siguiente:
- En un plazo de tres meses debe haber 50.000 suscripciones (en la Universidad de Málaga no se superan ni los 40.000 estudiantes).
- El sorteo de las matrículas se realizará un año después de la fecha de finalización del concurso (el plazo finaliza el 30 de noviembre de este año y el sorteo sería en 2013).
Si ya de por sí parece cómico, otra de las condiciones del sorteo para que se realice es que los 50.000 suscriptores no se pueden dar de baja en los siguientes dos meses. Aunque seamos de letras, os vamos a hacer un pequeño cálculo de lo que ganaría esta empresa en el hipotético caso de que se cumpliesen todos los requisitos para la estafa el sorteo:
Esa es la cantidad que ganaría la empresa Aldama, responsable de la web, sólo en los dos meses en los cuales es obligatorio estar registrado. En las bases aparece el nombre de David Pleite Diez como organizador del concurso, así mismo se acompaña un DNI y un domicilio situado en el centro de Málaga. La Taberna Global se desplazó hasta allí para intentar contactar con el organizador pero nos fue imposible. La dirección registrada en la web es verdadera a excepción de la letra del piso. No existe ninguna puerta D en la planta de ese edificio, así como el vecino de la puerta C no reconoce a ningún David Pleite Diez.
La Universidad de Málaga ha puesto el caso en manos de la Unidad de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil. “Es un timo y hay que actuar por la vía legal y alertando a los alumnos”, informan desde la UMA. También se ha dado el caso de alumnos que se han denunciado directamente contra el señor Pleite.
Desde La Taberna Global os pedimos que tengáis cuidado a la hora de registraros en páginas. Nunca se sabe dónde puede haber una estafa: en el correo, en el campus virtual, en tu página porno de cabecera, en el blog de cocina de tu madre… incluso aquí.
Te dicen que te regalan la matrícula y vas y te lo crees,Acerca de Miguel Ángel López
3º de Periodismo y aquí esclavizado me tienen.