Hoy la historia de la música comunista rusa está de luto. Una voz impecable, letras inolvidables, personaje donde los haya…El fundador del himno internacional de Rusia ha muerto.
Eduard Khil, más conocido como Эдуард Анатольевич Хиль, falleció anoche tras haber soportado cuatro días en coma a causa de un derrame cerebral, según nos cuenta los servicios de inteligencia ruskis.
Su nombre completo es Eduard Anatolyevich Gil y nació el cuatro de septiembre de 1934 en Smolensk (¡intentad pronunciarlo bien!), una ciudad de la Rusia occidental. Después de graduarse en el Conservatorio de LENINgrado, comenzó su andadura musical como barítono.
Fue un artista innovador, atreviéndose a cantar piezas de autores rusos tan conocidos de los 60 como Arkady Ostrovsky, Andrey Petrov y otros con apellidos similares acabados en -sky. Haciendo énfasis de su patriotismo rojo, llevó a la fama canciones populares del régimen soviético como “Sólo necesitamos la victoria”.
A finales de los 70′, cuando se percató de que su carrera como solista había acabado, escogió la profesión de docente y “probó suerte” en la Academia de Arte Teatral de San Petersburgo.
Aquí no acaba la historia de este espécimen singular. Comenzó un proyecto llamado Prepinaki con su hijo a finales de la década de los 90 sin éxito, pero su frustración artística cambió cuando dio el salto a la fama internacional en 2010 gracias al vídeo de su canción ‘Estoy tan contento de estar finalmente en casa’. La cifra de visitas en Youtube ascendió a dos millones en un tiempo récord. Se convirtió en ídolo de masas y fenómeno de Internet, causando verdadero furor en muchos países. España no iba a ser menos. Andreu Buenafuente lanzó una campaña en su late show de la Sexta en la que pedía a los telespectadores enviar sus propios vídeos cantando el `trololó´. Además el guapo de Berto Romero hizo una versión.
Khil explicó en una entrevista que la letra del hit contaba la historia de un vaquero que regresaba a su casa de la pradera (made in USA), y claro, la libertad de expresión de la que se goza en los regímenes comunistas no iba a ser menos y fue prohibida por los censores soviéticos. El presidente ruso, Vladimir Putin, ha expresado sus “condolencias” en un mensaje a la esposa y al hijo de éste.
A pesar de haberse quedado sin letra este maravilloso tema puesto que transmitía esa visión estereotipada del `American Life´, se propuso entonarla simplemente y nació una leyenda, no es otra que la del `Trololó´. Desde aquí la Taberna Global propone a todos los lectores un acto de solidaridad y empatía con el pueblo ruso, esto es, un minuto de silencio por la trágica perdida.
(Un minuto después…)
¿Quién no ha tarareado esta melodía en el bus? ¿Quién no la ha cantado de fiesta? ¿Quién no la ha puesto al final de un podcast universitario? Solo quedar decir: Te echaremos de menos “king of all trolls”.
Adiós a Mr. Trololó,Acerca de Isabel Vargas
Nacida allá por el verano del 92. Melómana indecente. De pequeña quería ser corresponsal de guerra, lo sigo intentando. Redactora de Cultura en La Taberna.