Las recientes disertaciones de José Luis Feito han trastocado los planes de viabilidad económica de la región de moda, Laponia, cuya prima de riesgo se ha disparado hasta cotas inusitadas
“Nunca había visto Laponia tan poblada, ojalá acabe la crisis ya”. Son palabras del propio David Bisbal al escuchar las declaraciones del presidente de la Comisión de Economía y Política Financiera de la CEOE, José Luis Feito. El economista aseguró en una intervención para recordar que es “inconcebible” que los parados cobren la prestación por el desempleo si han recibido una oferta de trabajo. “Como si es en Laponia”, ha especificado Feito.
José Luis Feito, haciendo honor a su apellido
Las reacciones no se han hecho esperar. UGT, como no podía ser de otra manera, ha sido la primera institución en tachar de “desfachatez”, “irresponsabilidad”, “ignorancia” y “vergüenza” los testimonios de todo un ex director ejecutivo del Fondo Monetario Internacional en Washington. Los improperios han salido de la boca de la mismísima Pilar Marín, mundialmente conocida por ser la portavoz del sindicato en Andalucía, donde tanto gozaron Rubalcaba y Cándido Méndez en el pasado Congreso del PSOE. El uno del otro, el otro del uno…
La diatriba no satisfizo a Marín, que propuso en exclusiva a la agencia ’Europa Press’ “que se haga dimitir obligatoriamente y se mande al exilio obligado a Laponia a todo representante empresarial que demuestre, con manifestaciones como éstas, que no tiene el más mínimo escrúpulo como personas”. Una petición acorde a la lógica de UGT, que combate el desempleo despidiendo a sus trabajadores.
Izquierda Unida, extensión política del sindicato (y o viceversa), ha rehusado hacer cualquier tipo de declaraciones al respecto, lo cual resulta sorprendente dado el historial del partido. Para comprender el motivo de este silencio hay que trasladarse a Moratalaz, distrito de Madrid en el que IU ha sido la única fuerza que ha visto incrementado su numero de votos. En él se encuentra la calle Laponia, zona limítrofe entre las barriadas de Pavones y Horcajo. No hace falta decir nada más. Una vez más, la izquierda calla por temor a despertar suspicacias.
En cualquier caso, se trata de un nuevo linchamiento público a un dirigente ejemplar como ya sucedió en su día con Camps por dos o tres trajes. Para más inri, se ha hecho oídos sordos de las matizaciones del empresario, que ha destacado que Laponia es un lugar “muy bonito, con trabajos bien remunerados” y “que todos admiramos”. “El observador dice lo que piensa más que lo que dice el observado”, ha sentenciado con este popular aforismo del ideólogo Jiddu Krishnamurti.
En Laponia hace frío, pero yo me río. Mi abuelito Yulupuki, es amigo mio. Noeli, Noeli, que feliz, que feliz, soy aquí. Ya lo decían en la teleserie de dibujos animados ‘Noeli’. Laponia es un lugar feliz. De hecho, es ahí donde nace la leyenda de Papá Noel, que viste un rojo muy UGT.
En resumen, La Taberna Global recomienda Laponia como lugar de vacaciones. Al fin y al cabo, es una de las pocas regiones que han conseguido escapar al Plan Bolonia.
Acerca de Manolo García
Fui becario en SUR para ganar experiencia y poder trabajar aquí. Ahora mismo no tengo novia, y estaría interesado tanto en una relación seria como en algo esporádico. Mis opiniones no me representan a mí, sino a otra persona. Ahora mismo tengo llamadas entrantes gratis.
