Se reunieron en torno a 12 mesas para tratar temas de investigación que acojonarían hasta al más facha estudiante de Derecho. Promover la ciencia decían, mientras la Facultad de Ciencias de la Universidad de Málaga guerrea para tener más clases docentes.
El pasado 28 de septiembre se celebró en 350 ciudades europeas la Researchers’s Night, salvo en Málaga, a causa de las intensas lluvias acaecidas aquel día, que hizo aplazar la cita al pasado viernes 19 de Octubre. Doce investigadores se dieron cita en la facultad de Derecho con el fin de acercar y subrayar la labor de los investigadores, en interacción con los asistentes en ‘microencuentros’.
La Noche de los Investigadores es un acontecimiento financiado por el VII Programa Marco de la Unión Europea, en el que han participado 11 instituciones de la provincia andaluza: todas las universidades menos la de Cádiz, el CSIC, el IFAPA y la Administración Regional.
Sobre las 19:00 horas el hall de la Facultad de Derecho ya acogía los participantes, en vano del encuentro que comenzó una hora después (esta vez no diluviaba, fue cosa de hacer esperar por gustirrinín), donde cada investigador tomaba asiento en la respectiva mesa de charla.
Durante una hora, los grupos de invitados conversaron directamente con los expertos sobre el tema de investigación que están tratando en la actualidad, algunos de los cuales fueron:
El mar Mediterráneo: Un laboratorio natural para el estudio del cambio climático con Francisco Criado; Comunicar el cambio climático con Bernardo Díaz, o Ciudad inteligente: Redes entre vehículos, infraestructura Wifi y nuevos servicios con Enrique Alba como investigador
Las metas que propone esta iniciativa son tan lógicas como irónicas: Luchar contra los estereotipos de bata blanca y ratón de librero sobre los investigadores. Lo cual se puede intentar, pero en cuanto das un paseo por Mordor y Teleco se te olvida y las miradas que cruzas irradian superpoderes dignos de ingenieros.
Despertar la vocaciones investigadoras y potenciar la ciencia como salida profesional. Descorazonador cuanto menos, dada la fuga de cerebros en España, cuyo gobierno disminuye (aún más) los presupuestos en investigación, ciencia e I+D+i mientras los países que nos ponen de ejemplo hacen lo contrario.
Concienciación sobre las oportunidades existentes en la Unión Europea. Fuera de Españistán oportunidades a porrillo, y si no, siempre queda en el rocambolesco campus de excelencia Andalucía Tech de la UMA.
Llegadas las nueve de la noche, finalizaron las mesas de discusión y tanto asistentes como investigadores tomaron un piquislabis de cortesía, y a las diez de la noche un grupo de alumnos de la Escuela Superior de Arte Dramático de Málaga representaron ‘Don Quijote en busca de Sancho’.