Luce una barba gris y frondosa. Habla atropelladamente y gesticula demasiado. Abre las piernas a la vez que la boca y manda a los exámenes a la mierda. Viste como si fuera el patriarca de los perroflautas. Fue profesor de Biología en la Universidad de Málaga. Y, según fuentes cibernéticas no confirmadas del todo, lo expulsaron para mandarlo a un psiquiátrico. Este ecologista nos cuenta sus impresiones sobre el futuro del 15-M, las movilizaciones sociales y sus proyectos particulares.
Nota previa al monólogo: se aconseja leer muy rápidamente para establecer una conexión directa con el entrevistado.
Estaba yo emprendiendo un siempre agradable paseo por las inmediaciones del campus de Teatinos con mi inseparable amiga y compañera de aventuras Mary Granados (publicista de La Taberna Global) cuando, de repente, un (no tan) desconocido apareció en nuestro camino animándonos a la lucha social. Al reconocerlo de otros encuentros memorables, no dudé un segundo y, como buena aprendiz de periodista, encendí la grabadora. El resto del trabajo, lo hizo el entrevistado por mí.
Por primera vez, los telediarios en España y en Europa han sacado más de diez minutos dedicados a la revolución en las calles de Grecia, que llevaba ya tres años fraguándose en la calle. Por lo tanto, la revolución de Grecia está llegando aquí con fuerza. Estamos en un post15-m donde, además, vamos a añadir dos ingredientes más: la reestructura del aula, la cual estamos exigiendo y vamos a repartir información (en Internet estamos trabajando el tema, se llama UAULA, está en Twitter, el blog se llama simbiodiversidad.blogspot.com, y os invito a sorprenderos con este blog). ‘Simbiodiversidad’ es un concepto que usamos y que incluye hasta el helicoptero éste que estás escuchando de la policía (nah, por decir algo). Todo el mundo está revolucionado y Málaga ahora mismo es un punto calentito, y España y Grecia, todos estamos igual.
Agustín Antúnez aprovecha nuestro espontáneo, casual y efímero encuentro para hablar de su proyecto personal: la reestructuración de las aulas y la liberación de los artículos científicos.
Aula en U. Como en Inglaterra. En Inglaterra no hay ni un sólo niño con 12 años que se coloque mirando a la pizarra. No se estropea la estructura de lectura del profesor, mientras que los alumnos están en una posición de 2.0 es decir, están mirándose todos los ojos continuamente, durante toda la clase. Eso hace que la eficiencia del aprendizaje y la enseñanza se dispare. Y otro punto muy bonito, que nos ha llegado de la revista Economy. La revista Economy ha publicado, ha dicho, que la primavera viene calentita en las universidades. Viene una primavera académica y está completada con el tema de los artículos científicos, porque están en revistas científicas y la gente no tiene acceso a ellos, entonces, se libera de las editoriales todo un arsenal de conocimiento científico del S.XXI y queremos aprovechar todas las revoluciones y llevarlas para adelante juntas.
“Totalmente, totalmente, totalmente”. De esa forma equipara Antúnez a los estudiantes malagueños con los valencianos, afirmando que tienen las mismas ganas y capacidad que los segundos. ¿Qué les falta, entonces, para lanzarse a ello masivamente?
Verás, no les falta nada. Todo el mundo critica que el 15-M está muerto. No, no, no. ¿Es que puedes estar corriendo 100km seguidos? No, tú puedes correr un día para coger el autobús, pero después descansas. Un proceso tan potente, tan innovador como el 15-M… La revolución más parecida a la del 15-M, en términos objetivos, es la del 36. Estamos igualitos que en el 36. El mayo del 68 es una herencia del 36. Da la casualidad que estamos en la Península Ibérica. Aquí hubo una revolución en el 36 que ha sido ignorada. No me refiero a la guerra. Cuando media España estaba en guerra, la otra media, desde Aragón a Valencia, Cataluña, Andalucía y todas las regiones liberadas hicieron una revolución anarquista… bueno, verás, hay problemas porque la base del comunismo y el anarquismo es la misma, la base luchadora. Hay que buscar todo lo que tenemos en común. Entonces ahora los comunistas, los anarquistas, los feministas, todo el mundo pa’lante, todo el mundo pa’lante con una idea básica: el entorno virtual que hemos creado, que es un entorno paradisiaco, inimaginable hace 50 o 100 años, el entorno paradisiaco de comunicación 2.0 que se había abortado en la sociedad real, en Internet se ha respuesto. La revolución que viene ahora es muy dulce, yo la veo tan dulce como el romilar. Dice “agua natural de mar, romilar, para descongestionar la nariz”.
Antúnez, siendo víctima del agobio y de la presión social (“Yo sé que la chica es muy guapa, pero, Agustín, vámonos ya”) le dedica unas apresuradas palabras a la crisis económica en la que nos vemos inmersos.
La crisis es una puta paradoja. No hay crisis si miras a Marruecos, no hay crisis si miras a tu pasado, no hay crisis si miras la cantidad de huertos urbanos que se están haciendo en muchos sitios, no hay crisis cuando miras que hay ciudades como Vitoria o Barcelona o Berlín, Dinamarca, donde el tráfico y los sistemas de transporte están hechos para el ciudadano, y no al revés. Tenemos que dejar de deslumbrarnos por los mensajes políticos y seguir contraadorando a la clase política, en este caso ahora a la derecha. Tenemos que mirar el territorio. Miremos las clases, miremos las calles. De hecho, la revolución avanza en muchos sentidos, pero hay un punto precioso al que no le damos la suficiente importancia: la crisis ha hecho que el número de coches que circulan por las calles y el numero de accidentes y el número de represión por parte del vehículo ascienda. El becerro de oro del capitalismo y el progreso era el coche. Lo que queremos es que en Málaga (aprovechando las soluciones que vienen desde Tánger, desde Berlín, desde Alemania y de todos lados, sin mirar si es al norte o al sur) nos pongamos al día en estas cositas. Sí, es muy bonito, tú dilo por ahí.
La improvisada entrevista llega a su climax en la conclusión de la misma. Aquí, muy apresuradamente, Antúnez concluye el monólogo diálogo hablando sobre su proyecto personal, UAULA, haciendo, además, una peculiar promesa académica.
Si en 24h tenemos un millón de visitas, al día siguiente haremos orgías en las aulas. Pero entiéndase la orgía. Ahora mismo hay 800 millones de neuronas y vosotros os jodéis porque no lo veis. Ahora mismo hay 800 millones de neuronas conectando con 800 millones de neuronas, ¿comprendes? Y cuando eso se lleve al aula, eso es una revolución de las dulces. Eso es una orgía sensorial.
Agustín Antúnez: "Si en 24h tenemos un millón de visitas, al día siguiente haremos orgías en las aulas",
Acerca de Isabel Bellido
Choni letrada. Último curso de Periodismo en la UMA. Escribo en La Taberna Global y en El Observador, y llevo dos veranos juntando letras también en Diario SUR. Aunque allí soy un poco más formal.
